Unción de los Enfermos

 
          Ellos salieron a predicar la conversión, echaban muchos demonios, ungían con óleo a muchos enfermos y los curaban.


(Mc. 6, 12-13)

Tal y como nos enseña el Catecismo de la Iglesia Católica (1053), “la compasión de Cristo hacia los enfermos y sus numerosas curaciones de dolientes de toda clase (cf. Mt 4,24) son un signo maravilloso de que “Dios ha visitado su pueblo” (Lc 7, 16) y de que el Reino de Dios está cerca”. “Con la sagrada unción de los enfermos y con la oración de los presbíteros, toda la Iglesia entera encomienda a los enfermos al Señor sufriente y glorificado para que los alivie y los salve. Incluso los anima a unirse libremente a la pasión y muerte de Cristo; y contribuir, así, al bien del Pueblo de Dios” (1499).
 
El enfermo necesita de una gracia especial de Dios, para que no desfallezca su ánimo y, sometido a prueba, no se debilite su fe. Por la presencia eficaz del espíritu de Jesús, la enfermedad pierde su carácter más duro, desesperado y doloroso para convertirse en signo evangélico de paz, serenidad y esperanza. Así, el cristiano evangeliza desde su enfermedad.
 
La santa unción se administra a los creyentes que por enfermedad o edad avanzada ven mermada gravemente su salud. En nuestra parroquia, además, se celebra comunitariamente este sacramento el día de la Pascua del Enfermo.
 
Asimismo, el grupo de Pastoral de la Salud atiende a nuestros enfermos y hace presente la parroquia en las casas de aquellos que se encuentran impedidos, mediante la sagrada comunión, la oración y la visita fraterna.
 
La persona que lo necesite puede contactar con el Párroco.

 

Parroquia de Santa María La Blanca - Fuentes de Andalucía (Sevilla)